En el Informe, que se encuentra disponible en el micrositio Ledesma Dialoga, la empresa publica sus indicadores de gestión sustentable. Allí informa, entre otras cuestiones, que logró un 7,7% menos de emisiones de gases de efecto invernadero respecto al ejercicio anterior y un 18% menos de emisiones totales respecto al año base 2006-2007.

Además, Ledesma explica que gracias a un nuevo sistema de plantación en curvas con tecnología de piloto automático pudo conducir las aguas pluviales en exceso por pendientes no erosivas. Y detalla que nuevos equipos de riego en pendientes le permitieron generar la presión necesaria para su funcionamiento sin el uso de energías derivadas de combustibles fósiles.

Ledesma continúa también con el Proyecto Biomasa, que consiste en generar energía a partir de los restos vegetales que quedan en el campo tras la cosecha. La empresa lleva invertidos 20 millones de dólares para reemplazar el consumo de gas natural mediante el aprovechamiento biomásico de malhoja.

Dichos logros se suman a otra gran apuesta de Ledesma: el Programa Inntegrar, que promueve la sinergia y el trabajo en equipo para consolidar una cultura corporativa de la innovación.

“Para nosotros es un orgullo contar que haber incentivado la innovación para mejorar los procesos productivos y las prácticas medioambientales ha dado sus frutos”, sostuvo Héctor Paez, gerente de Innovación y Medio Ambiente en Ledesma. Paez explicó que, gracias al Programa Inntegrar, surgieron novedosas ideas en las que la empresa se encuentra trabajando, como investigaciones para producir bioplásticos a partir de la melaza o el concepto de Abastecimiento 4.0, que busca la transversalidad entre las áreas de Compras y Ventas.

Los resultados presentados se dan en el marco del décimo aniversario del Programa Paisaje Productivo Protegido, con el cual buscan que la actividad productiva sea sostenible destinando recursos a la protección de los ecosistemas y la biodiversidad.

El Programa Paisaje Productivo Protegido, que en octubre de 2020 celebró su décimo aniversario, es una iniciativa elaborada por Ledesma en conjunto con la Fundación ProYungas, cuyo principio rector es que la actividad productiva no necesariamente es una amenaza para el ecosistema en el que se desarrolla, sino que puede incluso garantizar su preservación. Este concepto se basa en el hecho de que dichas actividades productivas son las que generan los recursos que permiten, entre otras cosas, el monitoreo y cuidado de la biodiversidad.

En el marco de este Programa, Ledesma fue la primera empresa argentina en realizar un Plan de Ordenamiento Territorial (POT), que consistió en realizar, con el asesoramiento de ProYungas, exhaustivos estudios para determinar qué sectores de sus áreas productivas podían destinarse a la producción agrícola y cuáles debían preservarse. Como consecuencia del POT, la empresa protege como reserva natural 100.000 de las más de 150.000 hectáreas que posee en Jujuy. Es decir que, por cada hectárea cultivada, destina dos hectáreas de bosques nativos para su conservación. Dicho trabajo constituyó un antecedente para la posterior Ley de Bosques.

En su último ejercicio, Ledesma continuó con su sistema de monitoreo, restauración y preservación. Se presentó en la convocatoria para el financiamiento de “Restauración de bosques nativos” con el fin de restaurar 713 hectáreas de bosques; y continuó con el monitoreo a través de 60 cámaras sensibles al movimiento para estudiar la biodiversidad.

Reporte Integrado

En noviembre de 2020 Ledesma presentó su Reporte de Sostenibilidad, utilizando por primera vez el Marco del Consejo Internacional de Reporte Integrado (IIRC), que propone integrar toda la información financiera y no financiera de la organización en un solo documento. Así, la compañía jujeña es una de las primeras empresas en Argentina en adoptar este modelo.

El Reporte Integrado de Ledesma puede recorrerse en detalle en el micrositio Ledesma Dialoga (www.ledesmadialoga.com.ar).