Entrevista a Georg Kell en la IV Asamblea de la Red Argentina del Pacto Global

04.11.2013 | Entrevistas

En el marco de la IV Asamblea de la Red Argentina del Pacto Global, realizada el pasado 23 de octubre, Alejandro Langlois, director de ComunicaRSE entrevistó en vivo a Georg Kell, Director Ejecutivo del Pacto Mundial de Naciones Unidas. Se mencionaron los objetivos de su visita a la Argentina, las nuevas modalides de recaudación de fondos y membresías de la iniciativa y el rol del sector privado en la nueva agenda para el desarrollo sostenible que plantea la ONU para despúes de 2015.


“Arquitectos de un Mundo Mejor” es el nombre de la última Cumbre de Líderes del Pacto Mundial de la ONU, que deseaba vincular los imperecederos valores universales de las Naciones Unidas con una nueva arquitectura mundial prevista en relación a la sostenibilidad corporativa concebida a partir de los “Objetivos de desarrollo del Milenio de 2015”.  Evocar el mismo nombre teniendo como invitado especial a Georg Kell, Director Ejecutivo del Pacto Mundial de Naciones Unidas, nos permitió conocer de primer mano el mensaje que desean trasmitir a través de este nombre, así como cuál es el papel del sector corporativo en la agenda post-2015.


¿Qué objetivo persigue su visita?
 

Es fantástico estar aquí en este país maravilloso. Mi principal objetivo es el de apoyar a la Red Argentina y a sus miembros a entender la importancia de la colaboración. Agradezco a la Red Argentina por haber hecho un trabajo maravilloso, y a PNUD Argentina por haber organizando esta Asamblea. Tengo la esperanza que mi visita sea no solo un incentivo, sino también, una llamada a la acción y a seguir hacia adelante, porque como es el caso de todas las iniciativas voluntarias, uno nunca puede detenerse. Las alternativas son: crecer y generar impacto o fallar. Por eso, quiero desafiarlos a incrementar el esfuerzo y a colaborar aun más. Ese es el verdadero propósito de mi visita.

¿Por qué cuando nace la iniciativa se decide generar una doble estructura de gobierno: una centralizada en Nueva York y otra a nivel local que son las Redes de cada uno de los países? ¿Cuál es el rol de las redes locales y cuál es la importancia que tienen en el desarrollo de la iniciativa?  

Desde el comienzo, el Pacto Mundial fue concebido como una llamada a la acción para el sector privado alrededor del mundo; como una evocación global basada en el lema que para que las empresas triunfen en el largo plazo, la sociedad (dónde operan y de dónde se nutren) también debe triunfar. Luego, naturalmente, emergieron redes locales porque toda acción global necesita un contexto local y porque la iniciativa del Pacto sólo puede crecer a través de redes locales sólidas y robustas.  

La lógica detrás de nuestro accionar sostiene que para que los mercados sean estables y predecibles, necesitamos invertir en el fortalecimiento de los pilares sociales, medio-ambientales y de buena gobernanza. Y que las cuestiones de ética, protección del medio ambiente, los derechos humanos y la promoción del bienestar de los trabajadores forman parte del propio interés de las empresas.

Nosotros, a nivel global, lideramos el pensamiento en materia de sostenibilidad, buscamos mantener la relevancia de la iniciativa en el tiempo y de adaptarla a los cambios. Funcionamos como eslabón entre el sector privado y las Naciones Unidas, especialmente en Nueva York pero también alrededor del mundo.

Pero es en el nivel local donde realmente las cosas suceden. Porque es allí donde las soluciones deben hallarse. Es por eso que en nuestra visión de futuro, vemos a las redes locales convertirse en la fuerza motora de la iniciativa y en la voz de lo que sucede a nivel nacional y regional. En nuestro horizonte está siempre la preocupación y los esfuerzos por encontrar la manera de brindar aún más apoyo a las Redes Locales, y en producir herramientas que sean útiles para ustedes, los miembros de la Red. Desde la Oficina en Nueva York, ponemos la mirada en ustedes como agente de innovación y progreso.

Pero siempre, la idea subyacente es que lo global y lo local deben complementarse. La universalidad solo tiene significado si hay un sentido real de apropiación a nivel local. Al día de la fecha tenemos 101 redes locales en funcionamiento, y acabamos de lanzar un proyecto orientado a renovar y reforzar nuestro compromiso con África, un continente que se encuentra en una etapa temprana de desarrollo, incentivando el emprendedurismo y la participación de los negocios en materia de RSE.

¿Cómo evalúan desde Nueva York el crecimiento de las redes locales de América Latina, en términos del volumen de participación de empresas y de las cualidades específicas de las agendas de sustentabilidad que se manejan en esos mercados?

Respecto de las empresas, lo cierto es que no importa de dónde vengan siempre y cuando tengan una actitud proactiva enfocada a promover y fortalecer los principios abogados por el Pacto Mundial de una manera colaborativa. Las redes, por su parte, son distintas entre sí pero todas son muy robustas. México, Chile, Brasil, Argentina… todas tienen desafíos y oportunidades en común. Todas luchan de alguna manera contra el pasado; todas están buscando soluciones prácticas para el futuro y esa es una de las razones por las cuales el mensaje predicado por el Pacto Mundial es tan bien recibido. También creo que Latinoamérica tiene un gran futuro por delante gracias a la  abundancia de recursos naturales en la región, la existencia de tienen fuertes sistemas educativos, tradiciones y un gran deseo por adquirir nuevos conocimientos. Así que creo que podemos decir que las redes de América latina son redes de vanguardia.

Pocos meses atrás el Pacto Mundial anunció una nueva política de financiamiento de la iniciativa. En un primer momento, esta política que entrará en vigencia en 2014, causó bastante inquietud entre las empresas. ¿Cómo será esa nueva política a partir del año entrante?

Primero, quiero darles una breve reseña histórica acerca del Pacto Global y su crecimiento. Estamos muy orgullosos que en su mayoría el Pacto ha crecido de manera lineal. Lo que cambió a partir del 2005 fue la introducción de requisitos estrictos de divulgación y comunicación (CoP). La rendición de cuentas tomó un rol preponderante, siendo importante no solo para la gestión de la imagen, sino también para generar credibilidad, lo cual también afecta a los inversores.

Cuando aplicamos la política de Comunicación de Progreso, lamentablemente encontramos que hasta un 40% de las empresas que se unen al Pacto no logran permanecer en él. Esto sucede por diferentes motivos (la intención no penetra en el ADN de las empresas; las empresas son adquiridas por nuevas entidades no firmantes o se fusionan; las empresas caen en bancarrota, etc). Pero el punto es que a pesar de esto el Pacto Mundial sigue creciendo y la RSE está convirtiéndose en el discurso dominante a nivel global.

Los temas tratados están tornándose más pragmáticos, más relevantes. Los inversores, cada vez más, están prestando atención a si las empresas tienen la capacidad de gestionar el riesgo, de adaptarse al cambio, si son eficientes en términos de utilización de recursos capitales y no capitales, si tienen sensibilidad social y si son lo suficientemente inteligentes para identificar nuevas oportunidades. Debemos mantener la tendencia de crecimiento; las compañías a nivel global y local demandan y esperan un sistema de servicios de apoyo de calidad por parte de nuestra oficina en NYC y de las redes locales. Y ninguna iniciativa puede prosperar sin apoyo. Y nosotros, desde el comienzo, no hemos recibido ni un dólar del presupuesto ordinario de las Naciones Unidas para sostener a la iniciativa. Siempre hemos dependido de contribuciones anuales voluntarias. De hecho, en el 2000 enviamos nuestra primera carta solicitando a las empresas interesadas en unirse al Pacto la realización de una contribución anual voluntaria. El resultado no fue muy alentador por lo que decidimos cambiar nuestro enfoque por uno más sólido; uno de colaboración con las redes locales.

Es por eso que los miembros, pronto, recibirán una carta invitándolos a hacer una contribución voluntaria para el crecimiento de la iniciativa. El Pacto Mundial seguirá estando estructurado alrededor de la participación y la contribución voluntaria. No se cobrará una tasa por participar. Pero sí los insto a que tomen con seriedad ésta solicitud, porque de lo contrario no podemos crecer: ni local ni globalmente. Para poder sostener el ímpetu del Pacto Mundial a lo largo del tiempo, la iniciativa necesita de recursos. Por eso, a partir de noviembre, una carta será enviada conjuntamente por el Pacto Mundial y las Redes Locales a sus respectivos miembros invitándolos a hacer una contribución voluntaria anual (aporte que puede ser destinado a la Fundación del Global Compact y/o a la Red Local). Esperamos recibir una respuesta positiva de más de 15% de ustedes, que es lo que hasta ahora hemos recibido. La nueva estrategia de financiación seguirá siendo voluntaria pero instamos a ustedes a ser parte del crecimiento. Ese es el modelo que intentamos seguir y pueden estar seguros que ésta contribución es una inversión a futuro; porque por un lado, le dará a la Red Local que los representa la capacidad para construir la infraestructura necesaria para proveer los servicios y generar el valor agregado que ustedes necesitan. Y por el otro, permitirá que los temas que vinculan a la sociedad y los negocios sean abogados de forma más efectiva. Y pueden también estar seguros que la ambición global de convertirnos en una fuerza transformadora se materializará.

Entonces, resumiendo, la nueva estrategia de financiación seguirá siendo voluntaria pero instamos a ustedes a ser parte del crecimiento. Ese es el modelo que intentamos seguir.

Meses atrás, Naciones Unidas presentó la arquitectura de la Agenda Post 2015 que tiene una estrecha relación con lo que conocemos como las Metas del Milenio. ¿Qué es lo que espera Naciones Unidas y el Pacto Global del sector privado en esa nueva agenda? 

 La siguiente pirámide fue creada por el sector privado. De hecho, fue la primera vez en la historia de las Naciones Unidas en que las empresas han tomado la iniciativa de examinar la manera en la que los intereses del sector privado se relacionan con los del sector público. La pregunta que hicimos fue: Si ustedes fueran los Jefes de Estado de los diferentes países del mundo ¿cómo lo estructurarían? El resultado fue la mencionada pirámide:

En la parte superior, se encuentra la prosperidad y equidad. Esto quiere decir, que los líderes de empresas reconocen que la inclusión es fundamental para el desarrollo. Entre tanto, en el sector inferior, los líderes reconocen por un lado la importancia fundacional de la educación, es decir, sin una fuerza de trabajo educada y capacitada las empresas no pueden crecer. Por otro lado, reconocen que el empoderamiento de las mujeres es un recurso de crecimiento que sigue siendo sub-explotado. Además, entienden que no pueden ser productivos si su fuerza de trabajo padece problemas de salud. Pero esto no es todo; los líderes del sector privado también entienden el nexo que existe entre el desarrollo y: 

- el medio ambiente, el saneamiento del agua y la energía 
- la paz, por sobre todas las cosas, siendo el bien público más importante 
- la seguridad; la infraestructura y la tecnología (un componente esencial para el crecimiento de las empresas) 
- la buena gobernanza (representada por gobiernos y estructuras estables, transparentes y predecibles) y los derechos humanos. 

En resumidas cuentas, vemos que el desarrollo empresarial no puede crecer en el largo plazo si no atiende seriamente a estas cuestiones. En consecuencia, los objetivos públicos y privados se superponen, por lo que es simplemente lógico colaborar para alcanzarlos.

Esta diapositiva articula una nueva visión para el futuro, donde los objetivos de largo plazo del sector privado y los objetivos públicos (en materia de desarrollo sustentable) están íntimamente relacionados cuando no superpuestos. Esta articulación es extremadamente importante, porque logra combinar y conectar todas las temáticas de forma transversal y porque muestra que hay un interés público y privado por llevar adelante las políticas necesarias para materializar dichos objetivos.

En el corazón de la sustentabilidad corporativa, siguen estando presentes el respeto y el apoyo. Para nosotros, la transparencia y la rendición de cuentas son condición necesaria para ser creíbles. Hoy en día, la divulgación de reportes de desempeño ya no es una opción. El cambio tecnológico y el empoderamiento de la sociedad han tenido como resultado que el acceso a la información ya no puede ser fácilmente restringido. Ya no se puede ocultar a los grupos de interés qué es lo que sucede en la cadena de valor de una empresa. Por eso recomendamos que sean proactivos y que tomen decisiones antes de que los problemas golpeen sus puertas. Y por eso ponemos énfasis en las CoPs y en los reportes integrados.

Por supuesto, los incentivos de mercado y la existencia de un entorno propicio son también aspectos clave en la construcción y la materialización de la arquitectura post 2015. La buena noticia es que cada vez más, los inversores y consumidores están enfocándose en empresas que están bien gestionadas, que respetan los derechos humanos, que se esfuerzan por minimizar la corrupción y por proteger el medio-ambiente. Como una organización voluntaria, nosotros debemos estar muy atentos a estos temas y cambios, así como las empresas. 

No debemos dejar de lado tampoco, al marco regulatorio que con sus múltiples proyectos de ley, parece querer seguir la misma tendencia. Y ninguna compañía puede mantener su liderazgo si falla en alcanzar cualquiera de estos objetivos. Entonces, lo que quiero decir, es que el caso de negocios para invertir en la promoción de estos objetivos (público-privados) es muy sólido. Pero lo que es realmente nuevo en esta arquitectura, es que todas las herramientas, metodologías y modalidades de colaboración ya existen. Esta arquitectura busca promover la colaboración, llevar los proyectos a una mayor escala y establecer prioridades estratégicas. Por eso, el desafío se encuentra en hallar oportunidades catalíticas, donde es posible tener un gran impacto, especialmente por medio de la colaboración. Estamos conmovidos por el apoyo que esta arquitectura ha recibido de parte de +1000 CEOs que estuvieron con nosotros en Nueva York recientemente.

Espero que ustedes inviertan tiempo en la Red local para identificar sus propias oportunidades estratégicas de colaboración. La idea es trabajar junto con ustedes, de modo sistemático de aquí al 2015, cuando las Naciones Unidas (esperamos) presenten el nuevo set de objetivos que reemplazarán a los ODM.