GRI evalúa eliminar los niveles de Aplicación debido a las críticas

05.02.2013 | Gestión

La credibilidad de los indicadores GRI está siendo cuestionada por investigaciones que revelan discrepancias en la información reportada y un vacío normativo en el proceso de verificación de los niveles de Aplicación. GRI publicó un comunicado respondiendo a las críticas y explicando su metodología de verificación. Como anticipamos hace unos años en una entrevista exclusiva a Nelmara Arbex, el GRI ha decidido eliminar la aplicación autodeclarada de niveles en la cuarta generación (G4) del índice. 


En los últimos días, organizaciones como Ethical Corporation y SOMO han publicado investigaciones sobre empresas que reportan con GRI que detectan una falta de correspondencia entre los indicadores reportados y el contenido real del informe. Pero sobre todo, se detecta una falta de verificación de los niveles aplicados a los reportes. 

Los indicadores GRI tienen tres niveles de aplicación (A, B y C) que son auto-declarados por la organización informante. La verificación oficial del nivel de aplicación es un proceso optativo y requiere tiempo y dinero. 

Mallen Bakker, directora de Ethical Corporation difundió los resultados de una investigación de la Universidad de Viena que revelan un alto número de discrepancias entre los indicadores reportados y el contenido del reporte.

Del 86 % de las empresas que afirmaron reportar indicadores laborales GRI  sólo un escaso 11% se cumplió con los términos completos de los indicadores. Para los indicadores de Derechos Humanos, sólo el 20% realmente cumplió con los términos.

Para Bakker se trataría de una mala aplicación de los niveles de Aplicación GRI por ser percibidos como un ranking o “sistema de calificación”  y por ello las empresas "hacen lo que sea necesario para conseguir la medalla de oro."  Lo que es preocupante para Bakker es que GRI no se encargue de regular estas discrepancias.

El uso incorrecto de los niveles de Aplicación GRI ha llevado a que se proponga su eliminación en la cuarta generación (G4) del índice. 

Otra investigación similar difundida por ComunicaRSE días atrás, reveló una falta de credibilidad en los indicadores GRI.

Dos tercios de las empresas encuestadas por la última investigación de SOMO (Centre for Research on Multinational Corporations) afirmaron reportar indicadores GRI que no aparecían en el contenido del reporte. El 60% de las veces en las que una empresa afirmó completar plenamente un indicador GRI no fue correspondido con información real, afirmó el estudio. 

Las discrepancias encontradas en 11 de 17 reportes alcanzaron incluso a las empresas que fueron auditadas por un tercero externo.

Estos resultados desalentadores impulsaron a que la Federación Sindical Europea de Servicios Públicos (EPSU por sus siglas en inglés) inicie un debate para buscar indicadores más estrictos para los reportes de sustentabilidad. Esta organización sindical fue la primera en recomendar el uso de los indicadores de la Guía GRI y el Suplemento Sectorial para el sector de la electricidad. 

Ahora GRI responde a estas críticas con una revisión de sus indicadores- la cuarta generación de indicadores se pondrán en marcha en mayo de 2013- y de sus niveles de aplicación por el Comité Técnico Asesor de GRI que evaluará su continuidad. 

Mientras se publica la nueva generación, GRI sugiere evitar la aplicación autodeclarada de niveles u optar por presentar su informe al GRI para la verificación oficial a través del GRI Application Level Check (servicio pago). También sugieren enviar los informes a la base de datos de divulgación gratuita de GRI.