ompañía de Tierras Sud Argentino, empresa dedicada a la producción agropecuaria en el país desde 1889, adquirida por el Grupo Benetton en 1991, inauguró un centro comunitario en la comunidad mapuche de Cushamen, localidad cercana a las estancias que administra en la cordillera patagónica. 
La donación de este centro, realizada por la compañía al Obispado de Comodoro Rivadavia, de quien depende la capilla de Cushamen, surgió a partir de requerimientos específicos de directivos del hospital, jóvenes y miembros del centro de jubilados de Cushamen, y con el fin de cubrir sus necesidades, a través de la construcción de un complejo compuesto por una biblioteca pública, un salón multiuso con salas de reuniones y lectura, y habitaciones triples para el uso de pacientes ambulatorios.
Diego Perazzo, Vicepresidente de CTSA, se refirió a la labor social de la compañía:   “Desde nuestros inicios, estamos comprometidos con el desarrollo del país y en particular de la Patagonia. Es así como venimos acreditando con acciones concretas, particularmente en todo lo relacionado con actividades que impliquen la promoción de la persona humana y la difusión de la cultura patagónica mediante emprendimientos tales como el Museo Leleque”, comentó.
“Nosotros, invertimos dinero y generamos recursos para contribuir al crecimiento del país y colaborar con la comunidad a través de obras concretas en las zonas cercanas a los  campos que administramos. Este proyecto demandó una inversión superior a los 350.000 pesos”, agregó el Dr. Perazzo.
El aporte de la empresa a la comunidad está focalizado básicamente en dos líneas de acción: el apoyo social y la extensión cultural, desarrollando con mayor fuerza este tipo de iniciativas en las comunidades aledañas a los campos de la Patagonia, región en la que la compañía considera debe dar mayor respuesta a los requerimientos y necesidades de las poblaciones, debido a que en Buenos Aires, donde también está presente, existe una amplia red de organizaciones no gubernamentales orientadas a brindar ayuda social y cultural a la comunidad.
Al respecto el Dr. Perazzo agregó: “En los últimos años, hemos orientado nuestro plan de responsabilidad social, priorizando el desarrollo de actividades de impacto positivo en la comunidad. Un ejemplo de ello es este centro comunitario que hoy estamos inaugurando, luego de un año intenso de trabajo para construir el edificio y acondicionar la capilla, junto con el apoyo de la comunidad local”.
Para finalizar, comentó: “Como empresa privada de gran envergadura en la zona y el país, siempre ha sido nuestra intención contribuir a la construcción de una nación fuerte e integradora, donde todos sus actores, desde los entes públicos a los privados, colaboren en el desarrollo de un país mejor y en beneficios económicos, sociales y culturales para todos sus habitantes“.