La RSE requisito del comercio exterior

23.08.2011 | América Latina

La Asociación de Exportadores (Adex), sugirió la semana pasada establecer una alianza público-privada para promover la certificación de productos elaborados en empresas peruanas que implementaron políticas de responsabilidad social, trato justo a sus trabajadores y al medio ambiente, tendencia que día a día crece en mercados como la Unión Europea y Estados Unidos. La gerente de Manufactura de Adex, Ysabel Segura, señaló que en el Perú se podría establecer un centro de acreditación "Fair Trade", para certificar a las empresas que se adecuan a ciertas normas exigidas por consumidores de la Unión Europea y Estados Unidos quienes privilegian con su compra los productos fabricados por empresas que trabajan la responsabilidad social, inclusive, aunque les suponga un costo más alto.


 

"Nuestro país tiene un nicho interesante para desarrollar la artesanía, las prendas y complementos de alpaca, las prendas de vestir de algodón, la joyería, los artículos de regalo, así como algunos productos del sector agro en los que se emplea gran cantidad de mano de obra", señaló.
Las empresas de esos sectores podrán acreditarse y ostentar certificados o algún sello que los diferencia de otros que no trabajan la responsabilidad social, agregó.
Recordó que poco antes del 2000, instituciones como la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD), el Banco Mundial y el Centro de Comercio Internacional (CCI) reconocieron la relación implícita que existía entre el comercio y el desarrollo.
Ello marcó el inicio de acciones en la búsqueda de otorgar oportunidades de negocio y desarrollo a países que no lograron beneficiarse de la apertura de mercados generada a través de las negociaciones de la Organización Mundial del Comercio (OMC) por su carencia de capacidades e infraestructura necesarias para establecer y mantener acciones comerciales.
Mencionó que este tema adquirió mayor importancia en 2001 al iniciar la OMC diversas negociaciones en los que se adoptaron los "Objetivos de Desarrollo para el Milenio", que busca dar un salto cualitativo de ayuda comunitaria a ayuda para el desarrollo.
Remarcó que importantes organismos internacionales como las Naciones Unidas y el CCI invierten recursos económicos para potenciar los recursos y habilidades de los países en desarrollo de manera tal que puedan contar con capacidades de exportación.
Refirió que a través de una fuerte campaña de llamado a la conciencia social muchos países de la UE motivan a sus consumidores a adquirir productos en cuya elaboración se cumplen muchos aspectos de responsabilidad social al darse un trato justo a los trabajadores que elaboran estos artículos.
De manera tal que los consumidores están dispuestos a pagar un precio mayor por ellos pues también son compatibles con el medio ambiente además de que otorga un trato justo.
Refirió que entre esas campañas está surgiendo con mucha fuerza la moda "ética" que mueve un comercio de hasta 51,000 millones de dólares por "consumo ético" (alimentos), en tanto que en la llamada "Moda ética" (prendas y accesorios) se moviliza 1,360 millones de dólares anuales.
"La moda ética propone prendas elaboradas con fibras naturales como el algodón orgánico y con un fuerte desarrollo de diseños que van de acorde con las tendencias de la moda y el gusto del consumidor", finalizó.

"Nuestro país tiene un nicho interesante para desarrollar la artesanía, las prendas y complementos de alpaca, las prendas de vestir de algodón, la joyería, los artículos de regalo, así como algunos productos del sector agro en los que se emplea gran cantidad de mano de obra", señaló.
Las empresas de esos sectores podrán acreditarse y ostentar certificados o algún sello que los diferencia de otros que no trabajan la responsabilidad social, agregó.
Recordó que poco antes del 2000, instituciones como la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD), el Banco Mundial y el Centro de Comercio Internacional (CCI) reconocieron la relación implícita que existía entre el comercio y el desarrollo.

Ello marcó el inicio de acciones en la búsqueda de otorgar oportunidades de negocio y desarrollo a países que no lograron beneficiarse de la apertura de mercados generada a través de las negociaciones de la Organización Mundial del Comercio (OMC) por su carencia de capacidades e infraestructura necesarias para establecer y mantener acciones comerciales.
Mencionó que este tema adquirió mayor importancia en 2001 al iniciar la OMC diversas negociaciones en los que se adoptaron los "Objetivos de Desarrollo para el Milenio", que busca dar un salto cualitativo de ayuda comunitaria a ayuda para el desarrollo.
Remarcó que importantes organismos internacionales como las Naciones Unidas y el CCI invierten recursos económicos para potenciar los recursos y habilidades de los países en desarrollo de manera tal que puedan contar con capacidades de exportación.

Refirió que a través de una fuerte campaña de llamado a la conciencia social muchos países de la UE motivan a sus consumidores a adquirir productos en cuya elaboración se cumplen muchos aspectos de responsabilidad social al darse un trato justo a los trabajadores que elaboran estos artículos.
De manera tal que los consumidores están dispuestos a pagar un precio mayor por ellos pues también son compatibles con el medio ambiente además de que otorga un trato justo.
Refirió que entre esas campañas está surgiendo con mucha fuerza la moda "ética" que mueve un comercio de hasta 51,000 millones de dólares por "consumo ético" (alimentos), en tanto que en la llamada "Moda ética" (prendas y accesorios) se moviliza 1,360 millones de dólares anuales.
"La moda ética propone prendas elaboradas con fibras naturales como el algodón orgánico y con un fuerte desarrollo de diseños que van de acorde con las tendencias de la moda y el gusto del consumidor", finalizó.