Según Ligteringen, el objetivo de esta nueva guía es ayudar a que las Memorias de RSE sean más comparables, auditables y relevantes y que sirva de verdadero marco común de reporte a nivel global.
Entre las novedades que presentó, se destaca la reducción de 97 a 79 indicadores luego de haber sido sometida la guía a un proceso de consulta pública que tuvo por objetivo buscar una mayor precisión y exactitud. Otro dato a tener en cuenta es que los principios se limitarán a 10 y no a 11 como hasta ahora.

También manifestó que GRI se ha convertido tanto en un estándar de comunicación como de gestión ya que sirve para hacer un diagnóstico de situación e incluso de auditoría interna para ser evaluada por terceras partes independientes. Es por ello que expresó estar a favor de que las empresas informen sobre los problemas y desafíos, ya que contando sólo lo bueno van a perder credibilidad y no van a lograr alcanzar la confianza de los grupos de interés y mucho menos solucionar los inconvenientes que se les presentan.

Sobre los grupos de interés también dijo que es muy importante tener en cuenta la información que ellos consideran es relevante y que hay que identificar sus necesidades e intereses y no abundar con datos que pueden carecer de importancia para una empresa en particular.
Esta jornada se dio en el marco de difusión del borrador del texto de la nueva Guía del Global Reporting Initiative (GRI).