Proyecto de ley de RSE en la provincia de Buenos Aires

27.09.2011 | Contratapa

La diputada bonaerense Adriana Cudós (FPV-Segunda sección electoral) presentó un proyecto de ley tendiente a promover en territorio bonaerense la Responsabilidad Social Empresaria (RSE), para que las PyMEs asuman un compromiso voluntario pero continuo, para hacerse cargo de los impactos que causa su negocio en las diversas partes interesadas. Entre las ventajas que puede traer aparejado para el empresario bonaerense que suscriba los principios de esta ley y confeccione su balance social, es anticiparse a la implementación de la norma ISO 26.000, que prevé que las PyMEs deberán ser "socialmente responsables", asume la autora.


 

Se trata del cumplimiento de la función económica, social y ambiental que tiene una empresa, pero más allá de las expectativas que dicta la ley y que tiene la comunidad respecto a la compañía.
De esta forma las empresas "socialmente responsables" contribuyen al desarrollo y bienestar de la sociedad promoviendo, entre otras cosas, el respecto por la dignidad de sus trabajadores y por los derechos humanos en general, del medio ambiente, solidaridad con la sociedad en la que están insertas, todo esto volcado en un "balance social" que la empresa que asuma el compromiso de actuar con responsabilidad social deberá redactar.
La RSE contribuye a la diferenciación y fidelización de clientes. Actualmente, los activos intangibles como la ética empresaria, la reputación, la confianza, etc., son una fuente segura de generación de ventajas competitivas, según los académicos enfocados al tema.
La ética y la responsabilidad social deben internalizarse en la gestión de la empresa, de manera de definir objetivos teniendo como visión la sustentabilidad, la cual contempla la rentabilidad del negocio y, al mismo tiempo, remarca los valores de equilibrio ambiental y equidad social.
"Este enfoque está basado en cumplir con este triple objetivo a través de mejorar el modo de relacionarse tanto con el público interno como el externo, los cuales incluye a los empleados accionistas, consumidores, proveedores, ambiente, comunidad, gobierno y sociedad", expresa la legisladora en sus fundamentos.
Asimismo, Cudós señaló: "Esta ley espera ser el puntapié inicial para el desarrollo de una cultura empresaria basada en la ética y la responsabilidad social, destacando los valores internos de la organización. Una buena manera de comenzar a mostrar los esfuerzos realizados en este sentido es mediante la publicación del balance social, herramienta que permite evaluar y determinar el impacto de la actividad de la empresa en los aspectos no sólo económicos, sino también ambientales y sociales".
(CampoNOVA.com)

Se trata del cumplimiento de la función económica, social y ambiental que tiene una empresa, pero más allá de las expectativas que dicta la ley y que tiene la comunidad respecto a la compañía.
De esta forma las empresas "socialmente responsables" contribuyen al desarrollo y bienestar de la sociedad promoviendo, entre otras cosas, el respecto por la dignidad de sus trabajadores y por los derechos humanos en general, del medio ambiente, solidaridad con la sociedad en la que están insertas, todo esto volcado en un "balance social" que la empresa que asuma el compromiso de actuar con responsabilidad social deberá redactar.
La RSE contribuye a la diferenciación y fidelización de clientes. Actualmente, los activos intangibles como la ética empresaria, la reputación, la confianza, etc., son una fuente segura de generación de ventajas competitivas, según los académicos enfocados al tema.

La ética y la responsabilidad social deben internalizarse en la gestión de la empresa, de manera de definir objetivos teniendo como visión la sustentabilidad, la cual contempla la rentabilidad del negocio y, al mismo tiempo, remarca los valores de equilibrio ambiental y equidad social.
"Este enfoque está basado en cumplir con este triple objetivo a través de mejorar el modo de relacionarse tanto con el público interno como el externo, los cuales incluye a los empleados accionistas, consumidores, proveedores, ambiente, comunidad, gobierno y sociedad", expresa la legisladora en sus fundamentos.

Asimismo, Cudós señaló: "Esta ley espera ser el puntapié inicial para el desarrollo de una cultura empresaria basada en la ética y la responsabilidad social, destacando los valores internos de la organización. Una buena manera de comenzar a mostrar los esfuerzos realizados en este sentido es mediante la publicación del balance social, herramienta que permite evaluar y determinar el impacto de la actividad de la empresa en los aspectos no sólo económicos, sino también ambientales y sociales".
(CampoNOVA.com)