Se entregaron los Public Eye Award 2014

28.01.2014 | Mundo

El 23 de enero, la Declaración de Berna (DB) y Greenpeace Suiza entregaron los Public Eye Awards de 2014 donde se eligieron a las empresas con el peor registro en términos de contaminación medioambiental y violaciones de los derechos humanos: Gazprom y Gap.


En la conferencia de prensa, celebrada en el Centro de la Comunidad de la Iglesia Protestante de Davos, el economista y pensador lateral checo Tomáš Sedláček planteó algunas preguntas interesantes como, por ejemplo, si el crecimiento es realmente la única solución y si todavía sus “bondades” siguen siendo tales.

A continuación, Brid Brennan, del Transnational Institute of Policy Studies, presentó el nuevo informe del instituto: “Estado del poder corporativo”, que refleja el grado de poder que han adquirido las empresas transnacionales, y lo mucho que siguen beneficiándose de la crisis económica y financiera actual.

Kalpona Akter, quien de niña trabajó en el sector textil de Bangladesh, ofreció reflexiones desde el otro extremo del espectro, demostrando la impotencia de muchos trabajadores de la industria textil y la magnitud del sufrimiento de estas prácticas irresponsables de las corporaciones.




Premio del Público (95279 votos para este caso)

Gazprom es la primera empresa que ha instalado una plataforma de extracción de petróleo, llamada Prirazlomnaya, en el mar de Pechora en el Ártico.

En diciembre de 2013, Gazprom se convirtió en la primera empresa del mundo que inició perforaciones petrolíferas en el Mar de Barents, en el Ártico. Desde que comenzaron las perforaciones, la empresa ya ha infringido varias normas federales de seguridad y medioambientales.

- Consecuencias: Investigaciones independientes sobre los posibles efectos de un vertido de petróleo indican que Gazprom no sería capaz de reaccionar ante un vertido de petróleo. Un vertido de tal alcance causaría una grave contaminación a largo plazo en esta frágil región.

El Servicio Geológico de los Estados Unidos concluyó que “no hay ningún método exhaustivo para limpiar el petróleo vertido en un mar helado”. Se estima que el área total en riesgo tiene una superficie marítima de más de 140.000 km2 y 3.000 km de costa, y que las reservas de fauna próximas y hábitats críticos para las aves marinas árticas y la morsa se verían gravemente amenazados.

- Causa: Gazprom es responsable de considerables vertidos de petróleo en sus operaciones en tierra. Gracias a imágenes por satélite y visitas sobre el terreno, los especialistas de Greenpeace Rusia han identificado 206 vertidos de petróleo en 6 yacimientos donde Gazprom realiza operaciones de perforación. Gazprom también estuvo implicada en un desastre que hubo en una perforación en mar abierto que mató a 53 personas en diciembre de 2011, cuando la plataforma apuntalada Kolskaya volcó durante el remolque. La plataforma operaba bajo contrato con una subsidiaria de Gazprom, a la que nunca se ha hecho responsable del accidente. Sin embargo, su responsabilidad en esta tragedia está clara.

Los recortes frecuentes del presupuesto y de las medidas de seguridad en sus operaciones de remolque contribuyeron al accidente. El mundo ya ha visto cómo Shell, a pesar de gastar miles de millones de dólares e invertir años de esfuerzo, fue totalmente incapaz de trabajar de forma segura en el Ártico de Alaska.

El pésimo historial de Gazprom augura lo peor para esta prístina y vulnerable región.
Los contribuyentes rusos corren el riesgo de pagar, junto con el resto del mundo, por los fracasos de Gazprom en el Ártico y también probablemente por las consecuencias de un vertido de petróleo en la región ártica.

Culpable: Actualmente Open Joint Stock Company Gazprom (“Gazprom”) es la empresa petrolífera más grande del mundo y su principal propietario es el estado ruso. En 2012, Gazprom declaró beneficios netos de 83 mil millones de dólares estadounidenses.

Gazprom también es un gigante de los medios de comunicación; su “Gazprom Media Holding” es una de las empresas de medios de comunicación más acaudaladas de Rusia, con una facturación de más de 2 mil millones de dólares estadounidenses. La empresa utiliza ampliamente sus canales de televisión y radio para influir en la opinión pública, como, por ejemplo, representando las acciones pacíficas de Greenpeace destinadas a proteger el medio ambiente como actos de terrorismo ecológico de otros países.

Premio del Jurado (44342 votos)

Tras el derrumbamiento de la fábrica Rana Plaza de Bangladesh, donde murieron más de 1.100 trabajadores, más de 100 marcas mundiales de prendas de vestir han asumido la responsabilidad de la seguridad en la cadena de suministro mediante la firma del Acuerdo sobre seguridad y protección contra incendios de edificios en Bangladesh.

Sin embargo, el gigante de la moda Gap, uno de los principales compradores de ropa producida en Bangladesh, se ha negado a firmar este acuerdo vinculante con los sindicatos. En lugar de ello, está menoscabando activamente una reforma seria promocionando un programa no vinculante controlado por la empresa completamente desprovisto de rendición de cuentas con respecto a los trabajadores.

Gap ha sustituido una estrategia de publicidad para la seguridad y los derechos de los trabajadores, acción a la que se han unido otras empresas, como Wal-Mart y Target.

- Consecuencias: Más de 4 millones de personas, el 85% de las cuales son mujeres, trabajan en la industria de 20 mil millones de dólares estadounidenses de la confección textil de Bangladesh. El rápido crecimiento del sector ha venido acompañado de un enorme coste humano. Los incendios de fábricas y derrumbamientos de edificios son hechos habituales que se deben a infracciones flagrantes de los estándares de seguridad.

Las marcas internacionales que se proveen en Bangladesh, como Gap, no han asegurado que sus proveedores cumplan las normas de seguridad más básicas exigidas por la normativa local. Asimismo, los trabajadores de la confección trabajan jornadas inadmisiblemente largas por salarios de miseria. Y si se atreven a luchar por sus derechos se arriesgan a perder sus puestos de trabajo o algo incluso peor.

La negativa de Gap a contribuir a esta reforma tan necesaria está poniendo en grave peligro la vida y seguridad de las personas.

- Causas: El abastecimiento responsable por parte de marcas mundiales como Gap es indispensable para mejorar la industria. Sin embargo, las fábricas que utilizan a menudo carecen de las medidas de seguridad básicas, como salidas de emergencia, escaleras suficientes y sistemas eléctricos modernos. La dirección ha demostrado estar dispuesta a sacrificar vidas pidiendo a los empleados que trabajen en construcciones estructuralmente inestables.

Gap tiene la responsabilidad de respetar los derechos de los trabajadores de la confección y garantizar su seguridad en toda la cadena de suministro. El nuevo Acuerdo —que Gap se niega a firmar— exige más normas de seguridad, requiere inspecciones independientes y obliga a los minoristas participantes a colaborar en la financiación de mejoras de seguridad en las fábricas de sus proveedores.

Pero mientras Gap y sus aliados persistan en su falaz acuerdo, muchas fábricas seguirán inmunes a un escrutinio serio y no dispondrán de los fondos necesarios para instaurar las medidas de seguridad esenciales.