Sistema de etiquetado para que el consumidor conozca el origen de la energía

08.07.2011 | Contratapa

La Comisión Nacional de la Energía (CNE) está "poniendo en marcha este mes" el nuevo sistema de etiquetado de la electricidad, que permitirá al consumidor conocer el origen de la energía demandada, indicó la presidenta del regulador, María Teresa Costa.


 

La Comisión Nacional de la Energía (CNE) está "poniendo en marcha este mes" el nuevo sistema de etiquetado de la electricidad, que permitirá al consumidor conocer el origen de la energía demandada, indicó la presidenta del regulador, María Teresa Costa.
Este sistema también permitirá a los consumidores industriales que estén "dispuestos a pagar un sobrecoste por la energía que apoyan" que se les reconozca este esfuerzo en la 'web' de la CNE, lo que "reforzará su imagen dentro de la Responsabilidad Social Corporativa (RSC)", indicó Costa en un coloquio organizado por 'Fax Press'.
El nuevo sistema de etiquetado de la electricidad, de cuyo funcionamiento se encarga la CNE, obliga a los suministradores a incorporar en la factura de la luz información acerca de las distintas fuentes de energía utilizadas para crear la electricidad consumida.
Esta nueva 'denominación de origen' de la luz también incluirá el CO2 emitido por el 'mix' de origen y los residuos radiactivos de la fuente nuclear utilizada. De forma paralela, se desarrolla un sistema de garantía de origen mediante el cual los consumidores podrán acreditar ante terceros que consumen energía 'verde', lo que les permitirá beneficiarse de servicios de alta eficiencia.
La presidenta del regulador hizo estas consideraciones a propósito de la nueva directiva sobre renovables de la UE. El papel de la CNE en este ámbito, señaló, es "aplicar de forma diligente el marco normativo".
Estabilidad regulatoria
En todo caso, Costa sostuvo en alusión a los cambios normativos en España que "la estabilidad regulatoria y jurídica es fundamental". "Es preciso una regulación lo más cuidadosa posible para ser lo más eficiente posible".
Por otro lado, se mostró favorable a que el sistema destine mejores primas a las fuentes energéticas que se encuentran en "fase de aprendizaje", y estimó que el sobrecoste en la remuneración descenderá conforme mejore la curva de aprendizaje de las nuevas tecnologías.
Los precios del mercado no siempre "capturan los costes" asociados con el desarrollo de fuentes renovables, aunque "la remuneración intenta dibujar un escenario futuro en el que las externalidades vayan desapareciendo", añadió.
Incentivo a través de presupuestos
La presidenta de la CNE se mostró a favor de que se incentive el desarrollo de energías renovables a través de los Presupuestos Generales del Estado. "Igual que hay programas especiales para el sector aeronáutico, debería haber programas especiales para el desarrollo de estas tecnologías", consideró.
Para Costa, la industria renovable debe ser considerada un "sector estratégico" y la tarifa eléctrica no puede asumir el coste de desarrollo de esta actividad. Si se incorpora toda esta partida a la tarifa, sostuvo, "se generan tensiones en el diseño que hace el regulador".
El esfuerzo en el desarrollo de las renovables "no afecta sólo al mundo de la energía, sino también al desarrollo tecnológico", por lo que también "debería ser asumido desde el ámbito industrial".
(Europa Press)

Este sistema también permitirá a los consumidores industriales que estén "dispuestos a pagar un sobrecoste por la energía que apoyan" que se les reconozca este esfuerzo en la 'web' de la CNE, lo que "reforzará su imagen dentro de la Responsabilidad Social Corporativa (RSC)", indicó Costa en un coloquio organizado por 'Fax Press'.
El nuevo sistema de etiquetado de la electricidad, de cuyo funcionamiento se encarga la CNE, obliga a los suministradores a incorporar en la factura de la luz información acerca de las distintas fuentes de energía utilizadas para crear la electricidad consumida.

Esta nueva 'denominación de origen' de la luz también incluirá el CO2 emitido por el 'mix' de origen y los residuos radiactivos de la fuente nuclear utilizada. De forma paralela, se desarrolla un sistema de garantía de origen mediante el cual los consumidores podrán acreditar ante terceros que consumen energía 'verde', lo que les permitirá beneficiarse de servicios de alta eficiencia.
La presidenta del regulador hizo estas consideraciones a propósito de la nueva directiva sobre renovables de la UE. El papel de la CNE en este ámbito, señaló, es "aplicar de forma diligente el marco normativo".

Estabilidad regulatoria
En todo caso, Costa sostuvo en alusión a los cambios normativos en España que "la estabilidad regulatoria y jurídica es fundamental". "Es preciso una regulación lo más cuidadosa posible para ser lo más eficiente posible".
Por otro lado, se mostró favorable a que el sistema destine mejores primas a las fuentes energéticas que se encuentran en "fase de aprendizaje", y estimó que el sobrecoste en la remuneración descenderá conforme mejore la curva de aprendizaje de las nuevas tecnologías.

Los precios del mercado no siempre "capturan los costes" asociados con el desarrollo de fuentes renovables, aunque "la remuneración intenta dibujar un escenario futuro en el que las externalidades vayan desapareciendo", añadió.
Incentivo a través de presupuestos
La presidenta de la CNE se mostró a favor de que se incentive el desarrollo de energías renovables a través de los Presupuestos Generales del Estado. "Igual que hay programas especiales para el sector aeronáutico, debería haber programas especiales para el desarrollo de estas tecnologías", consideró.

Para Costa, la industria renovable debe ser considerada un "sector estratégico" y la tarifa eléctrica no puede asumir el coste de desarrollo de esta actividad. Si se incorpora toda esta partida a la tarifa, sostuvo, "se generan tensiones en el diseño que hace el regulador".
El esfuerzo en el desarrollo de las renovables "no afecta sólo al mundo de la energía, sino también al desarrollo tecnológico", por lo que también "debería ser asumido desde el ámbito industrial".
(Europa Press)