Danone presenta nueva política climática

10.11.2015 | Cambio Climático

La nueva política climática de Danone pone el foco en las emisiones netas de carbono de alcance directo y extendido a su cadena. Se ha propuesto alcanzar la meta de cero emisiones en ambos alcances.


Para lograr este objetivo, Danone será co-crear soluciones con sus grupos de interés, incluyendo a las comunidades de agricultores, proveedores, clientes y consumidores.

En el año 2000, Danone definió objetivos ambientales y un plan de 10 años. En 2008, intensificó sus objetivos y se propuso reducir su intensidad de carbono en un 30% en cinco años, un objetivo que alcanzó y superó a finales de 2012.

La nueva política climática va mucho más allá. Se trata no sólo en las zonas bajo la responsabilidad directa de Danone (fabricación, envasado, logística), sino también las áreas donde la responsabilidad es extendida como por ejemplo en la agricultura.

Danone ya ha medido el alcance completo de su Huella de carbono, que asciende a 18,8 millones tons de emisiones.

Entre 2008 a 2014, se produjo una reducción de la intensidad de carbono de Danone en un 42% (en gramos de C02 por kilo de producto vendido)

Esta nueva política climática tiene como objetivo alcanzar cero emisiones, a partir de una reducción del 50% en la intensidad de carbono entre 2015 y 2030. La compañía también se compromete a empezar a reducir las emisiones en términos absolutos antes de 2025.

Para lograr estos objetivos, la estrategia climática de Danone ha definido cinco prioridades:

• Reducir las emisiones de carbono en el alcance total de la compañía

• Desarrollar iniciativas de "carbono" para capturar emisiones en los ecosistemas naturales.

• Eliminar totalmente los efectos de la deforestación de la cadena de suministro de Danone en 2020.

• Construir la resiliencia en los ciclos de agua y alimentos.

• Ofrecer productos saludables que garanticen el uso de ingredientes de origen sostenible.

Al comentar sobre esta nueva política, Emmanuel Faber, director ejecutivo de Danone, dijo: "Nuestras actividades están directamente relacionados con la naturaleza y la agricultura. Los riesgos del calentamiento global son altos y afectan tanto a los ciclos naturales de los que dependemos, como a la gente y sus condiciones de vida, empezando por los agricultores familiares y ganaderos. Hoy hemos decidido ir mucho más más lejos y estamos adoptando un paso decisivo para un modelo de crecimiento sostenible".

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