Cae el trabajo voluntario entre los argentinos y se ubica en la cifra más bajas desde 1997

24.02.2014 | Gestión

La nueva edición del estudio sobre voluntariado de TNS muestra que la proporción de quienes realizan tareas voluntarias descendió en relación a los últimos años.


Hoy, 1 de cada 10 argentinos señala que realiza tareas voluntarias (13%), proporción 20 puntos por debajo de su pico más alto, alcanzado en el 2002. Por otro lado, al preguntar acerca de donaciones, 2 de cada 10 argentinos declaran  haber donado dinero a entidades sin fines de lucro durante el 2013.

4 de cada 10 voluntarios realizan este tipo de tareas semanalmente, destacándose  los mayores de 65 años, los sectores altos, los más educados y los habitantes del interior del país. El sondeo muestra que la satisfacción con el trabajo voluntario es muy alta entre aquellos que lo realizan. 

Predisposición a colaborar: 3 de cada 10 manifiestan su predisposición a participar en el futuro con entidades sin fines de lucro, ya sea mediante el trabajo voluntario o donando dinero. Los más entusiasmados a la hora de colaborar y donar son las mujeres, los adultos de 35 a 49, los sectores altos, los argentinos más  educados y los habitantes del interior del país.

En la actual medición el trabajo voluntario declarado alcanzó el porcentual más bajo desde el primer relevamiento por parte de TNS en 1997. Asimismo, descendió levemente con respecto a la medición anterior (del 15% al 13%) y se ubicó cerca de 20 puntos porcentuales por debajo de su valor más alto, alcanzado en el 2002. Al analizar la tendencia se observa una estabilidad en los 90, seguido por una alta participación de la sociedad en el voluntariado durante el período 2000-2004 y una baja sistemática en los últimos años.

Los estudios históricos de TNS Gallup acerca del voluntariado muestran que esta actividad altruista pierde fuerza en nuestro país. No hay dudas, el trabajo voluntario viene descendiendo en las últimas mediciones. Este descenso puede estar relacionado a una percepción positiva sobre el bienestar social, que se traslada en una falta de involucramiento por parte de la sociedad. No obstante, se muestra entre los argentinos una predisposición a colaborar en el futuro, tanto como voluntario o como donante.

Asimismo, es importante tener en cuenta que las tareas voluntarias generan altos niveles de satisfacción personal y en general el voluntariado es concebido como gratificante y placentero. Esta concepción, sumada a la predisposición manifiesta en la sociedad, representa un importante potencial a ser explotado por las ONGs y entidades sin fines de lucro. En este sentido, las organizaciones deberían focalizar sus energías en atraer a aquellos grupos que se muestran más predispuestos a colaborar: las mujeres, los adultos de 35 a 49 años, los más educados, los habitantes del Interior del país y los argentinos pertenecientes a los sectores más altos.