Etiquetas verdes para electrodomésticos

11.07.2011 | Contratapa

A través de una Resolución de la  Secretaría de Industria, Comercio y Minería comienza a regir la obligatoriedad de realizar para quienes fabriquen, importen, distribuyan y comercialicen en Argentina heladeras de refrigeración y congelación de alimentos el Etiquetado Energético respectivo. Al momento de elegir una heladera, las personas quedan cautivas del consumo de ese equipo por muchos años, por lo tanto, es importante saber que se puede elegir la heladera que posee mejor eficiencia energética, es decir igual prestación con menor consumo.


 

Es decir, no puede haber en el mercado nacional este tipo de equipos sin su correspondiente Etiquetado de Eficiencia Energética, el cual debe figurar en la puerta de la misma o en su defecto en algún lugar visible donde el comprador pueda conocer estos datos a la hora de elegir.
El INTI a través de su Organismo de Certificación es la única institución estatal habilitada a emitir la certificación que autoriza  la Etiqueta de Eficiencia Energética.
En Argentina, se usa una etiqueta comparativa de eficiencia energética la cual contiene información que describe el consumo eléctrico anual, los volúmenes de alimentos refrigerados y/o congelados, la clasificación en estrella y la clase climática.
Los datos volcados en la etiqueta se obtienen a partir de ensayos determinados por Normas (IRAM) basadas en normas internacionales. De lo que se trata es de tener una herramienta de cálculo y ensayo para poder comparar, desde el punto de vista del consumo de energía y las capacidades, equipos de diferentes calidades, tamaños, consumos y prestaciones. Para ello se somete a los equipos a distintos tipos de ensayos con los cuales se obtienen el volumen de alimentos frescos, de  alimentos congelados y el consumo energético,  valores que van a ser utilizados en el cálculo de Eficiencia Energética. De esta forma, se puede clasificar el equipo dándole una Letra y especificar el consumo de energía. El organismo certificador avala dicho ensayo de laboratorio.
Los sistemas de Etiquetado de Eficiencia Energética, junto con las eficiencias mínimas han probado ser una herramienta efectiva dentro del conjunto de acciones que comprenden los Programas de Uso Racional de la Energía desarrollados hasta ahora en el mundo.

Es decir, no puede haber en el mercado nacional este tipo de equipos sin su correspondiente Etiquetado de Eficiencia Energética, el cual debe figurar en la puerta de la misma o en su defecto en algún lugar visible donde el comprador pueda conocer estos datos a la hora de elegir.
El INTI a través de su Organismo de Certificación es la única institución estatal habilitada a emitir la certificación que autoriza  la Etiqueta de Eficiencia Energética.

En Argentina, se usa una etiqueta comparativa de eficiencia energética la cual contiene información que describe el consumo eléctrico anual, los volúmenes de alimentos refrigerados y/o congelados, la clasificación en estrella y la clase climática.

Los datos volcados en la etiqueta se obtienen a partir de ensayos determinados por Normas (IRAM) basadas en normas internacionales. De lo que se trata es de tener una herramienta de cálculo y ensayo para poder comparar, desde el punto de vista del consumo de energía y las capacidades, equipos de diferentes calidades, tamaños, consumos y prestaciones. Para ello se somete a los equipos a distintos tipos de ensayos con los cuales se obtienen el volumen de alimentos frescos, de  alimentos congelados y el consumo energético,  valores que van a ser utilizados en el cálculo de Eficiencia Energética.

De esta forma, se puede clasificar el equipo dándole una Letra y especificar el consumo de energía. El organismo certificador avala dicho ensayo de laboratorio.
Los sistemas de Etiquetado de Eficiencia Energética, junto con las eficiencias mínimas han probado ser una herramienta efectiva dentro del conjunto de acciones que comprenden los Programas de Uso Racional de la Energía desarrollados hasta ahora en el mundo.