"La RSE está muy por debajo de lo que el país necesita"

22.06.2011 | América Latina

El nivel de compromiso social de las empresas en México, tanto nacionales como multinacionales, está muy por debajo de lo que el país necesita, señaló el coordinador residente del sistema de Naciones Unidas en México, Magdy Martínez-Soliman. Durante el primer foro de creación de valor compartido (CVC), organizado por Grupo Nestlé, el funcionario hizo un llamado a las empresas a buscar la cara humana del mercado laboral mediante la adopción de valores y principios compartidos en materia de derechos humanos, laborales y del medio ambiente.


 

En ese sentido, el presidente ejecutivo de Nestlé México, Juan Carlos Marroquín Cuesta, explicó que la creación de valor compartido tiene como punto de partida el estricto cumplimiento de la legislación local e internacional.
Precisó que el concepto, desarrollado por el profesor Michael E. Porter, de la Universidad de Negocios de Harvard, es una forma de entender la responsabilidad social corporativa, diferenciándola de la filantropía tradicional al incorporar la responsabilidad social al proceso productivo.
Indicó que, de acuerdo con Porter, cuando la responsabilidad social compartida se ve de manera estratégica, puede convertirse en una fuente de gran progreso social, ya que el negocio aporta sus recursos, experiencia y conocimiento a las actividades que benefician a la sociedad.
Ante miembros de la comunidad empresarial, académicos y expertos en la materia, Marroquín Cuesta sostuvo que en la creación de valor compartido está la clave para la recuperación estratégica entre los diferentes actores involucrados en la cadena de valor, a fin de contribuir al bienestar de la sociedad y de su entorno.
Hoy más que nunca el país requiere iniciativas innovadoras del sector empresarial que aporten valor compartido bajo una estrategia integral, señaló.
En el contexto de la celebración del 80 aniversario de Nestlé en México, el presidente de la compañía en el país sostuvo que a través de este esquema las fábricas de la empresa han ahorrado en territorio mexicano 46 por ciento de agua y 39 por ciento de energía eléctrica en los últimos siete años, además de que se han impulsado acciones para el desarrollo rural, la nutrición y la preservación del agua.
Ejemplificó que la compañía ha trabajado en conjunto con el Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP) desde 1993 en la mejora del café mexicano, y que entre 1995 a 2009 se han realizado inversiones por 20.5 millones de pesos para investigación y asistencia técnica a productores de café del país.
Agregó que de 2001 a la fecha se ha beneficiado a 2 mil 189 productores pertenecientes a 69 comunidades, y se ha ayudado a la comercialización directa de 4 mil 624 toneladas del producto.
En ese orden de ideas, el director fundador de INIFAP, Jesús Moncada, criticó que actualmente el Poder Legislativo discuta la necesidad de incrementar impuestos para atacar el problema de la pobreza mediante subsidios.
La experiencia internacional y nacional indica que los subsidios más efectivos y eficientes en el combate a la pobreza son aquellos que fomentan actividades productivas, rentables, sustentables y generadoras de empleo, definió.
Durante su intervención, el coordinador y punto focal para Haití de la Unidad de Desarrollo Económico de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), Randolph Gilbert, habló de la importancia del trabajo mancomunado para alcanzar objetivos distantes, y sostuvo que la estrategia no sólo es aplicable a los organismos empresariales, sino para cualquier tipo de organización.
Presentó el caso de una organización no gubernamental haitiana llamada Veterimed, que mediante un proyecto denominado Let Agogó (Leche en abundancia), logró mejorar las condiciones de vida de los campesinos de ese país mediante la implementación de cambios en la producción y comercialización de leche, combinando sabiduría campesina con técnicas modernas.
También participaron el titular de la Secretaría de Salud durante el gobierno de Vicente Fox, Julio Frenk Mora; el presidente de la Comisión de Bioética de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos, Gerardo Jiménez Sánchez; la vicepresidenta editorial de Grupo Editorial Expansión, Rossana Fuentes Berain, y el presidente del Consejo Nacional Agropecuario, Juan Carlos Cortés.
(La Jornada)

En ese sentido, el presidente ejecutivo de Nestlé México, Juan Carlos Marroquín Cuesta, explicó que la creación de valor compartido tiene como punto de partida el estricto cumplimiento de la legislación local e internacional.
Precisó que el concepto, desarrollado por el profesor Michael E. Porter, de la Universidad de Negocios de Harvard, es una forma de entender la responsabilidad social corporativa, diferenciándola de la filantropía tradicional al incorporar la responsabilidad social al proceso productivo.

Indicó que, de acuerdo con Porter, cuando la responsabilidad social compartida se ve de manera estratégica, puede convertirse en una fuente de gran progreso social, ya que el negocio aporta sus recursos, experiencia y conocimiento a las actividades que benefician a la sociedad.

Ante miembros de la comunidad empresarial, académicos y expertos en la materia, Marroquín Cuesta sostuvo que en la creación de valor compartido está la clave para la recuperación estratégica entre los diferentes actores involucrados en la cadena de valor, a fin de contribuir al bienestar de la sociedad y de su entorno.
Hoy más que nunca el país requiere iniciativas innovadoras del sector empresarial que aporten valor compartido bajo una estrategia integral, señaló.

En el contexto de la celebración del 80 aniversario de Nestlé en México, el presidente de la compañía en el país sostuvo que a través de este esquema las fábricas de la empresa han ahorrado en territorio mexicano 46 por ciento de agua y 39 por ciento de energía eléctrica en los últimos siete años, además de que se han impulsado acciones para el desarrollo rural, la nutrición y la preservación del agua.

Ejemplificó que la compañía ha trabajado en conjunto con el Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP) desde 1993 en la mejora del café mexicano, y que entre 1995 a 2009 se han realizado inversiones por 20.5 millones de pesos para investigación y asistencia técnica a productores de café del país.

Agregó que de 2001 a la fecha se ha beneficiado a 2 mil 189 productores pertenecientes a 69 comunidades, y se ha ayudado a la comercialización directa de 4 mil 624 toneladas del producto.
En ese orden de ideas, el director fundador de INIFAP, Jesús Moncada, criticó que actualmente el Poder Legislativo discuta la necesidad de incrementar impuestos para atacar el problema de la pobreza mediante subsidios.
La experiencia internacional y nacional indica que los subsidios más efectivos y eficientes en el combate a la pobreza son aquellos que fomentan actividades productivas, rentables, sustentables y generadoras de empleo, definió.
Durante su intervención, el coordinador y punto focal para Haití de la Unidad de Desarrollo Económico de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), Randolph Gilbert, habló de la importancia del trabajo mancomunado para alcanzar objetivos distantes, y sostuvo que la estrategia no sólo es aplicable a los organismos empresariales, sino para cualquier tipo de organización.

Presentó el caso de una organización no gubernamental haitiana llamada Veterimed, que mediante un proyecto denominado Let Agogó (Leche en abundancia), logró mejorar las condiciones de vida de los campesinos de ese país mediante la implementación de cambios en la producción y comercialización de leche, combinando sabiduría campesina con técnicas modernas.
También participaron el titular de la Secretaría de Salud durante el gobierno de Vicente Fox, Julio Frenk Mora; el presidente de la Comisión de Bioética de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos, Gerardo Jiménez Sánchez; la vicepresidenta editorial de Grupo Editorial Expansión, Rossana Fuentes Berain, y el presidente del Consejo Nacional Agropecuario, Juan Carlos Cortés.

(La Jornada)