Cómo avanzan las empresas panameñas en Paridad de Género

23.12.2020 |

Promover la diversidad y la paridad de género en las empresas es una ventaja competitiva, en especial para las empresas latinoamericanas que deben enfrentar los nuevos desafíos presentados por la Pandemia.  Un estudio de Harvard Business Review del 2019 concluye que la diversidad de género se relaciona con empresas más productivas, al medir su valor de mercado e ingresos, sólo en el contexto que es auténticamente aceptada. Por lo cual, promover acciones prácticas, auténticas y sencillas en materia de paridad de género es clave para que las empresas latinoamericanas puedan avanzar en incorporar esta visión.  Asimismo, la inversión en las mujeres trae retornos directos e impacta a un núcleo más amplio de personas ya que las mujeres invierten el 90% de sus ingresos en sus familias y comunidades, a diferencia de los hombres que invierten solo 40%, de acuerdo con el IFC (International Finance Corporation).


En el caso de Panamá, la reducción de las brechas económicas de género tendría, además, un considerable impacto en la economía del país. Así lo indica un estudio del BID que estima que el Producto Interno Bruto per cápita de Panamá incrementaría un 21 por ciento al nivelar la participación laboral de las mujeres y los hombres. La tasa de participación laboral de las mujeres panameñas, de 51 por ciento, está 21 puntos porcentuales por debajo de la de los hombres y la tasa de desempleo de las mujeres alcanza el 8 por ciento.

Es innegable que las empresas latinoamericanas se enfrenten a mayores desafíos por la Pandemia y sus consecuencias económicas. En este contexto, el impacto de la COVID-19 sobre el empleo femenino ha sido muy significativo y la reducción del empleo en el primer trimestre 2020, en términos proporcionales, fue mayor en el caso de las mujeres que en el de los hombres. El Observatorio de la OIT, indicó que en toda Latinoamérica, han sido las mujeres, más que los hombres, las que han sufrido, en términos relativos, con mayor intensidad la pérdida de empleo. Así, mientras el rango de caídas en el empleo masculino va del 3% a 34%, el femenino se extiende entre el 7% y el 43%.

En este contexto, la OIT junto al Consejo Nacional de la Empresa Privada (CoNEP) de Panamá, a través de su Comité de Género, impulsaron una capacitación para apoyar a las empresas panameñas a desarrollar acciones prácticas, simples y efectivas en materia de paridad de género. Cerca de 30 mujeres empresarias y emprendedoras, se reunieron para abordar 49 buenas prácticas en materia de paridad de género que podrán aplicar a sus empresas y organizaciones.

Los contenidos fueron tomados del Modelo de Igualdad de Género SCORE (MIG SCORE), que nace fundamentado en los más de 8 años de experiencia global del Programa Empresas Competitivas, Responsables y Sostenibles (SCORE por sus siglas en inglés) de la OIT, con el apoyo financiero de la cooperación Suiza y Noruega.

El MIG SCORE propone un enfoque innovador que enseña y acompaña la implementación de las prácticas mínimas efectivas para gestionar la igualdad de género en las empresas, mejorando las condiciones de trabajo de mujeres y hombres, y la productividad de las empresas, apoyando así el cambio organizacional. Entre el 23 de noviembre y el 3 de diciembre las empresas panameñas recibieron contenidos de buenas prácticas y herramientas para la creación de capacidades para gestionar el talento humano con las gafas de género puestas.

“No se trata de un curso tradicional de género, sino de un espacio práctico, dinámico y participativo. Iniciamos con un proceso de reflexión sobre cuestiones de género, para luego avanzar en los cuatro pasos del MIG SCORE y sus cinco esferas de acción que identifican prácticas claves para la gestión eficaz del talento humano y la paridad de género. Desde paternidades activas, hasta herramientas como el buzón de sugerencias y el cheque del tiempo para gestionar los permisos laborales, la idea es darles acciones concretas que las empresas puedan implementar en el corto plazo”, indicó Carolina Trevisi Fuentes, Coordinadora Nacional Programa SCORE en OIT Colombia y capacitadora del curso.

“Sencillo y poderoso, paridad de género para la cotidianidad empresarial”, así se tituló este taller que además exigirá a las empresas implementar alguna de las 49 buenas prácticas de las esferas de acción del MIG SCORE. Fue el paso siguiente al Estudio de identificación de buenas prácticas en equidad de género en empresas multinacionales con operaciones en Panamá realizado en el 2019 por CoNEP con el apoyo de la OIT. Adicionalmente, CoNEP puso a disposición de las empresas una herramienta web que servirá para la priorización de buenas prácticas empresariales en materia de paridad de género en su sitio http://diagnostico.conep.org.pa/paridad-de-genero/autodiagnostico/

“El taller significa dar un paso al frente de nuestro estudio y asistir en la implementación de acciones concretas para acompañar a este grupo de profesionales para que se conviertan en multiplicadores de estas buenas prácticas. Reiteramos que seguiremos trabajando y buscando los mecanismos concretos que contribuyan a la transformación y valoración de la paridad de género en nuestro país, liderando iniciativas que promuevan el mejoramiento de las condiciones laborales de las mujeres en las empresas,  acciones que estamos impulsando a través de una hoja de ruta para el sector empresario panameño. Esta hoja de ruta servirá de herramienta para desarrollar un programa que incluya actividades educativas de formación y divulgación en las empresas y organizaciones empresariales, como compromiso con la promoción del empoderamiento femenino en los puestos de liderazgos que redunde en el desarrollo humano e integral de la mujer”, destacó Analisa Montenegro, directora ejecutiva de CoNEP.

Por su parte, Carmen Marenco, de la empresa panameña Productos Toledano y participante del taller, indicó que el mayor desafío que enfrentan empresas como la suya en materia de equidad de género son las “preconcepciones que se tienen sobre los roles de hombres y mujeres en la sociedad, y que desafortunadamente existen en la mente de todos. Solamente educando y siendo constantes podremos cambiar estas creencias que datan de mucho tiempo atrás”. Asimismo, resaltó que el  taller le resultó muy útil porque les permitió reconocer los prejuicios de género y utilizar herramientas prácticas para abordarlos.

“Valoro el taller porque fue sencillo pero poderoso.  Primero, hizo que te conectes contigo mismo para entender que uno es parte de la situación, luego te mueve hacia un pensamiento diferente dándote evidencias para el cambio. Y por último, te brinda herramientas tangibles y aplicables en las empresas, que no tienen un alto costo, pero que seguramente tendrán un impacto significativo para mejorar la forma en que se ve y se trata a las mujeres en las empresas”, resaltó Marenco.

 

Añadir nuevo comentario